Mejora tu estrategia de ventas: la relación con los clientes difíciles

No importa lo que haces para ganarte la vida: siempre hay que un cliente difícil que te pone al borde de un ataque de nervios, que a menudo tiende a estar en desacuerdo contigo.

Al final del día, lo que necesitas es tratar este tipo de clientes con compasión y esto te ayudará a fortalecer tu estrategia de ventas, a crecer la empresa y a administrar un nuevo software para ventas que será un activo invaluable.

Si experimentas dificultades al tratar de obtener ciertos clientes y de entender cómo funciona el Inbound Marketing, he aquí cinco consejos para ayudarte a lo largo del camino.

1. Cuida de ti mismo, primero

¿Cómo manejas mejor las situaciones difíciles,  cuando estás fresco y descansado, o cuando estás agotado y estresado?

Una de las claves para ser capaz de manejar clientes difíciles es cuidar de ti mismo. Asegúrate de dormir y ejercitarte mucho, y que come alimentos saludables.

Lo creas o no, estos tres factores juegan un papel importante en tu bienestar físico, mental y emocional.

2. Invierte más tiempo en la relación

Un cliente difícil puede requerir más tiempo que un cliente satisfecho feliz, ya que es posible que necesite más tiempo para explicar determinadas decisiones y estrategias.

Invierte más tiempo en tus relaciones con estos clientes para asegurarte de que estás frente a tus principales preocupaciones y prioridades.

Con el tiempo, puedes dar lugar a un aumento de las tasas de conversión.

3. Pasar más tiempo juntos

Por ahora, la mayoría de quienes utilizan Internet con regularidad saben lo fácil que es que la gente sea desagradable y fea detrás de sus equipos.

La mejor manera de suavizar las situaciones difíciles y conectar con la gente es poder hacerlo en persona.

Si es posible, pasa tiempo con tus clientes difíciles en persona, y no por teléfono o por correo electrónico.

4. No dudes en pedir ayuda a la alta dirección

La alta dirección es en la parte superior por una razón, y probablemente han demostrado éxito siendo capaces de tratar con personas difíciles.

Si estás teniendo problemas con un cliente específico, no dudes en informar a la alta dirección.

La alta dirección puede ser capaz de ofrecerte consejos y sugerencias sobre cómo hacer frente a la situación, e incluso pueden ser capaces de intercambiar ideas contigo sobre cómo hacer que el cliente esté feliz.

Tienes que involucrarlo en nuevas estrategias de marketing y ventas. Tienen que trabajar bien juntos para poder generar leads.

5. Poner fin a la relación, si es necesario

En algunos casos, un cliente podría ser tóxico para tu negocio hasta el punto que tu mejor opción es dejarlo ir, simplemente.

Si un cliente sigue exigiendo demasiado de tu tiempo en la fase de "consulta libre", o está regañando a tus empleados hasta el punto en que están dispuestos a renunciar a sus trabajos, a continuación, podría ser prudente para poner fin a la relación.

Después de todo, el tiempo es dinero, y si estás perdiendo el tuyo y el de tus empleados, nadie será capaz de beneficiarse de la relación.