Es natural que, a pesar de todas las evidencias existentes, no estés seguro de que sea para tu negocio. Y sigas haciendo lo mismo de siempre.

Lamento, pero antes que nada debo advertirte: soy un extremista cuando se trata de Inbound Marketing.

Todos los días, ante clientes, colegas (y el que se deje) reitero que el marketing tradicional, que interrumple las conversaciones de los usuarios, es una porquería y la estrategia de Inbound marketing es el camino a seguir.

Tú dirás que lo digo porque quiero que compres los servicios de Inbound Marketing de nuestra agencia y porque además somos socios de Hubspot en México.

Ok, puede ser. Pero... ¿y si estoy en lo cierto?

¿Qué pasa si llega el día en que la mayoría de las empresas mexicanas B2B, como la tuya, hacen Inbound?

¿Qué pasaría si todas tus llamadas en frío, envíos de correos, publicidad online, anuncios impresos y participaciones en ferias y convenciones comienzan a deteriorarse a un ritmo tan dramático que te quedaras sin ninguna manera de conectar con clientes potenciales? ¿Y si ese día es mañana (o el año que viene)?

400 millones de personas en el mundo están utilizando actualmente el software de bloqueo de anuncios online. El promedio que alguien haga clic en un banner comercial se ha reducido a 0,12%, en todas las plataformas.

El bloqueo de anuncios creció un 141% en 2015.  El 56% de los anuncios nunca serán vistos. Sin embargo todavía muchas empresas pagan por este tipo de anuncios.

El resultado de tal desperdicio es de mil millones de pesos en ingresos por publicidad perdida o desperdiciada en México (estoy hablando sólo en el 2015).

Me parece increíble (y absurdo) que sigas confiando en esas estrategias de marketing que implican forzar tu presencia en el mundo digital y en la vida de tus prospectos.

Te lo vuelvo a insistir: si continúas transitando por esa ruta, aceleraras la pérdida de tu presupuesto de marketing y arruinaras la percepción de tu marca entre tus clientes potenciales.

No me cansaré de repetir la frase de John Wanamaker, conocido por haber dicho: "La mitad del dinero que gasto en publicidad se desperdicia; el problema es que no sé cuál mitad”.

Muerto el marketing... ¡viva el Inbound!

Por suerte hay una ola de nuevos marketers, emprendedores y empresarios dispuestos a cuantificar todos los aspectos de marketing y ventas. Cada vez somos más.

Este movimiento se centra casi principalmente en pequeñas y medianas empresas que han tenido que ser más inteligentes en ver qué y dónde gastan. Aún así no hay razón por qué las empresas más grandes no adopten la misma metodología..

Me molesta tanto el exceso de publicidad online que hago todo lo posible para alejarme de ella.

Esto incluye el cambio de la estación de radio, el abandono de la TV por cable (que perjudica los medios de comunicación en el largo plazo) para convertirme en parte activa de los que utilizan Ad Blocker en su navegador para la computadora de la oficina y para mi teléfono.

Si estás interesado en conocer en profundidad los alcances de la metodología de Inbound Marketing, te sugiero leer este artículo.

Antes de terminar, quisiera explicarte al menos un par de tácticas de Inbound Marketing que te costarán una milésima parte de lo que pierdes actualmente  con tu gasto en publicidad masiva.

Email Marketing para nutrir leads: Tal vez esto ya lo estás haciendo. Pero, en lugar de tratar de vender a todos, apuntar a los personas que han visitado su sitio. Dales una oferta Ofrecer una guía para ayudarlos. Una vez que tenga sus direcciones de correo electrónico y se decidieron a escucharte, comienza enviando un correo electrónico semanal, en un horario razonable, no cuatro veces al día.

Ayuda y educa (en lugar de vender): En vez de ofrecer productos o servicios por los que nunca te preguntaron, que tal si los ayudas a resolver problemas. Si los ayudas a solucionar un problema o duda, van a ser más propensos a devolverte el favor, visitar tu sitio y, si haces las cosas bien, tal vez recomendarlo a muchos otros que tienen el mismo problema que él.

¿Aún crees que no sabes de Inbound? Su filosofía no es difícil de entender. Investiga.

Ponerlo en práctica es lo complicado si no te capacitas o no recibes la asesoría adecuada.

Pero no confíes en lo que te digo. Asesórate mejor... y descubrirás por qué tengo razón.